Corrian aquellos palito noventas (`90s) y yo en la flor de mi vida: de los "cinco contra uno" que me dejaban mas cansado que de costumbre, de las primeras piteadas al cigarrillo, la primera mina, la cara llena, pero llena, de esas grasitas indeseables, las JOCAS, y una infinidad de huevadas que me marcaron. Ahí pasaron cosas que definieron mis gustos y aptitudes a futuro, EL PUTO ROCK, y no recuerdo algo tan claro como cuando oí por primera vez aquella canción, "Alive". Recuerdo al Lucho y el Nico, Nanán y el Loly, al Juan, la Francia a quien estaba reconociendo ya que fuimos al jardín juntos.
Nuestras fiestas eran underground, y si ibamos a las fiestas del cole, no mas bebíamos y criticabamos a los que allí iban, luego acababamos en los rieles, donde de vez en cuendo llegaban los pacos echarnos, pero cada uno sabia que hacer en esos casos, algunos se colgaban de los postes de corriente, otros al suelo entre la hierba.
También el gusto por hacer cosas con las manos, mi necesidad de doblar alambres o romper cartones y pegarles algo con fines seudo-artísticos.
Mucho tiempo en solo en casa porque mi vieja trabajaba. Mi gusto por los chocolates y por los panqueques con mermelada o el delicioso y tan añorable manjar ( no tengo leche condensada para hacer) El manjar debería ser universal, deberían venderlo en todos lados.
También recuerdo a mis amigas: Andrea, Alejandra, Carolina (con quien pasaba mis días enteros y a quien recuerdo con cariño porque no tengo contacto con ella) Marcela. Recuerdo que solo las dejaban ir a fiestas si iba yo. Cosa que no era mala porque me presentaban sus amigas y compañeras del cole, y ya veran...
Mi auto groso y viejo, si que le recuerdo, azul y extra grande, cupian 8 personas facilmente, y consumía mas de lo normal, era un Chevrolet Opala del 78 y claro, con él triunfaba y ademas de gente cupia una banda completa, bateria incluída. De la cual hablaré mas adelante
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